La esculta, entre los 15 y los 17 años permite introducirse en la magia del compañerismo. Su lema «Unidad» se refiere a la importancia de apoyarse en el resto y de trabajar como uno para lograr proyectos comunes.
Nuestra esculta se basa en un poblado celta, Zyania, en el que el trabajo se reparte para lograr sus objetivos. Esta es la sección en la que se trabaja más a fondo la espiritualidad. En esta edad se empieza a perfilar la personalidad de uno mismo.
El grupo se autogestiona, y el motor de sus acciones es su propia motivación. Sus monitores les guiarán en el proceso pero son ellos los que crean el camino que seguirá la esculta durante el año.
Las etapas de progresión les ayudan a continuar avanzando a nivel personal y son:
- Niño
- Adolescente
- Adulto